Después de 47 años de existencia en el mercado (de manera no consecutiva) la filial de Tailandia ha presentado la Yamaha SR400 Final Edition; una motocicleta que despide casi 5 décadas de historia de un modelo que se convertiría en una leyenda a nivel mundial.
Así nació la Yamaha SR400
Un modelo tan emblemático merece que su historia sea contada y es que la Yamaha SR400 que nació en Japón en 1978 fue concebida gracias a un accidente sufrido por el director técnico de la casa de los diapasones en aquella época.
Esta es la Yamaha SR400 que salió al mercado en los años 70
El personaje en cuestión se lesionó un tobillo encendiendo un prototipo de la XT500 (motocicleta de la cual nació la SR400) allí encomendó a sus ingenieros que diseñaran un nuevo sistema de encendido y que crearan una moto bajo el lema “fácil de usar”.
Y fue así como Atsushi Ishiyama presentó la SR400, moto que llegaba con el novedoso sistema de palanca de descompresión y un sistema de mirilla para facilitar el encendido (recordando que esta moto no cuenta con encendido eléctrico, solo por patada).
Pero además, era un modelo que se presentaba revolucionario, pues estaba más encaminado a un uso cotidiano con mucho confort y una posición de manejo más relajada con respecto a la familia XT.
De Japón para el mundo
Aunque la Yamaha SR400 fue planeada para Asia tuvo una incursión en otros mercados como el europeo en 2014, allí su fiabilidad, sencillez y su silueta retro, conquistaron a los puristas del viejo continente y claro la motocicleta ingresó en aquel año con un nuevo sistema de alimentación por inyección electrónica pero aún se mantenía con su característico sistema de arranque por patada, siendo éste su elemento más llamativo.
Llegó el adiós para la Yamaha SR400 Final Edition
Sin cambios en su estética y eso es lo primordial, la Yamaha SR400 Final Edition solo tiene unos ligeros cambios de pintura, con tonos blanco, gris mate metalizado y el clásico vino tinto con detalles en dorado.
El motor de la SR400 Final Edition sigue siendo el inmortal monocilíndrico refrigerado por aire SOHC 2 válvulas de 399 CC, que claramente para su versión final cuenta con alimentación electrónica de combustible (recordando que en su nacimiento y primeras décadas estaba alimentado por carburador).
El bloque declara 23 caballos de potencia a las 6500 RPM y 27.4 Nm de par motor a las 3000 RPM. La transmisión es manual de 5 velocidades.
Una moto básica en esencia
Su ciclística al igual que su motor es sencillo, pero eficiente y duradera. El chasis es de doble cuna de acero, la suspensión delantera es una horquilla convencional de 150 mm de recorrido y atrás las suspensiones dobles brindan 105 mm de recorrido, en los frenos aún cuenta con sistema de tambor o campana trasero y adelante con un disco de 298 mm y una pinza de doble pistón.
La Yamaha SR400 Final Edition brilla por sus rines de radios que le dan ese toque clásico y elegante gracias a su diámetro de 18 pulgadas en ambos ejes. Su peso en seco es de 174 kilogramos y el depósito admite 12 litros de combustible.
Cero electrónica
En la parte electrónica la Yamaha SR400 Final Edition no cuenta con absolutamente ninguna asistencia electrónica a parte de la inyección de combustible y es que esa es su esencia y su encanto, incluso permanece sin sistema de encendido eléctrico, lo que nos transporta directamente a los orígenes del motociclismo: Encender y disfrutar.
Como complemento, su tablero totalmente análogo de 2 grandes relojes solo nos informa la velocidad, las revoluciones, cuentakilómetros total, uno parcial y unas luces indicadoras de norma como neutro e intermitentes.
Adiós a una leyenda de 47 años
Con esta SR400 Final Edition, Yamaha Tailandia con altura, pero con nostalgia dice adiós a 47 años de historia y en Europa muchos coleccionistas aún se reúnen en torno a la Yamaha SR400 para mostrar su fiabilidad y obviamente sus proyectos de personalización y con la calidad que ha demostrado la SR400, sabemos que estará en las carreteras del mundo por muchos años más.