Antes que nada, queremos hacer claridad a quienes nos leen que esta nota en ningún momento es un reclamo, es solo el análisis de las palabras de David Alonso, que para nosotros se interpretan en Mentalidad Ganadora vs. Control Mental.
Para poder entender un poco este contenido de hoy, haremos una introducción con las palabras del mismo David Alonso:
He podido aprender mucho en las posiciones delanteras. Al principio había un poco de lío, pero me veía con posibilidades de ganar y en estas situaciones es importante respirar y saber esperar. Me han podido las ganas y en esa curva había entrado un poco pasado alguna vez, hasta que al final no lo he podido salvar. Quiero pedir disculpas al equipo por el resultado de hoy. Ahora toca concentrarnos en Hungría para adaptarnos rápido en un circuito nuevo.
¿Qué pasó? Se impuso la mentalidad ganadora a la paciencia
El 17 de agosto, David corría en Austria. En las prácticas y la clasificación, se notaba que estaba muy bien. Un ritmo muy parecido al de los pilotos más experimentados, tanto así que clasificó en el quinto lugar.
Desde la largada Alonso se unió al grupo de punta, al igual que su compañero Daniel Holgado. En algunos momentos llegó a estar tercero y parecía que podía dar más.
Fue así como a seis giros del final, la mentalidad ganadora del piloto se impuso al control mental y al querer llegar al segundo lugar, donde estaba Dani Holgado, el #80 perdió el control de la moto y quedó por fuera de la competencia.
Marc Márquez, Pecco Bagnaia, Jorge Lorenzo…
En MotoGP la mente pesa tanto como el acelerador. La llamada mentalidad ganadora impulsa a un piloto a buscar siempre la victoria, incluso en condiciones difíciles, al estilo de Marc Márquez en sus épocas de Honda. Esa ambición mantiene viva la emoción del deporte, pero también puede transformarse en un riesgo innecesario que comprometa una carrera o incluso toda la temporada.
En contraste, el control mental se centra en la capacidad de medir cada movimiento, aceptar cuándo es mejor asegurar puntos que perseguir un triunfo incierto y mantener la calma bajo presión, como pasaba con Pecco Bagnaia unos años atrás. No significa falta de ambición, sino inteligencia estratégica y emocional para pensar más allá del resultado inmediato.
Recordamos esa temporada de Jorge Lorenzo, cuando tenía todo el potencial, la moto, pero no podía con los resultados. Se fue de vacaciones de verano y regresó con una mentalidad diferente.
El desafío está en lograr el equilibrio: conservar el hambre de victoria, pero con la claridad suficiente para entender que, a veces, sumar de manera constante es el verdadero camino hacia el éxito.
Holgado suma y David en ceros
Sabemos que sumar puntos hace la diferencia en cualquier campeonato, que para uno de los dos sumar es genial, mientras que para el otro irse en ceros es difícil. Lo que sí está muy claro es que David Alonso y su mentalidad ganadora, lo están llevando a sentir más confianza en la categoría y en la moto.
A estas alturas del mundial ambos pilotos del Aspar Team, ya tienen un podio y seguro veremos más.
Lo que nos llena de orgullo es ver a Diogo Moreira, imponerse en la categoría intermedia, en un podio muy variado: Brasil, España e Italia.